Almeida, José Luis
José Luis es el típico gestor de derechas con estudios superiores y una oposición de postín, dedicado a la política porque le sale de natural
José Luis es el típico gestor de derechas con estudios superiores y una oposición de postín, dedicado a la política porque le sale de natural
En 1998, MAR tuvo que salir por patas de la Secretaría de Estado de Comunicación por amenazar a periodistas, y porque sus formas de extrema derecha fascista le iban mal a su partido en eso de alcanzar el centro
Pasar unos días en el Madrid de la relaxing cup of café con leche in Plaza Mayor, es para cualquier 942 caro, tortuoso, incómodo, desalentador y pesado
Alberto González, el novio de Ayuso, ha tirado por la borda el triste protagonismo de Koldo, haciéndose un hueco en la mierda nacional del saqueo y la pasta gansa por la cara
Ábalos es a la organización lo que su colega Koldo a las corruptelas: el modelo zafio de cómo dirigir e imponer entre risas, cigarrillos, corbatas flojas y cubatas
Koldo es el arquetipo del burdo sinvergüenza que ronronea alrededor de los que mandan, siempre con una argucia en la cabeza para sacar tajada, siempre con una idea cutre para apañar unos euros, siempre con las manos listas para la rapiña
Santander es un barco contra las rocas porque al timón no está la más capacitada. Ni mucho menos. Las mayorías absolutas no convalidan la incompetencia
Para saber el grado de mediocridad de un político solamente hay que observarlo cuando parece que esta haciendo algo de valor, aunque sólo sea estar, sin más actividad que esa, que también, además, es lo más habitual.
La normalización de los procesos debiera evitar discriminaciones, injusticias y corruptelas, todo eso que los migrantes que llegan a nuestro país a buscarse la vida no encuentran en la mayoría de sus países
La inacción complaciente es el caldo del cultivo del desastre social. Y precisamente de esa cándida actitud se aprovechan los malnacidos que tienen algo que ver en la ecuación
Elucubrar que una incómoda espera al sol o al frío para comprar un décimo de lotería de doña Manolita te puede arreglar el futuro es el clavo ardiendo de los pobres
El color de nuestro tiempo, después de años de avance cívico y de crecimiento social, no se ha perdido en las brumas en blanco y negro y el olor a pólvora que siempre acompañan a las derechas
Su sentido patrimonial del país está indeleblemente unido a su forma de ser y de comportarse. Y tampoco ellos se detienen ante nada para recuperarlo si las urnas deciden que gobiernen otros
La historia nos tiene demostrado que solamente cuando nos hemos ocupado de nosotros mismos con vehemencia hemos llegado a donde debíamos
La rapiña del trabajo creativo de los demás es tan frecuente y tan descarada que ha pasado a ser normal darla por hecho y sólo tener miedo a que suceda, sin más remedio que resignarse
Una hostia colectiva de la progresía que dice mucho de las malas campañas, de los malos compañeros de aventuras y de la mala suerte de empezar nada en medio de una pelea
La autocrítica por no haber elegido a los mejores es poderosamente sana a la hora de quedarse en paz con uno mismo. Rectificar es de sabios, y evitar el sufrimiento colectivo de soportar mediocres e inútiles también es muy loable en términos de solidaridad y convivencia
El emprendimiento en el ocio audiovisual no es negocio para los pequeños y los independientes, que no pueden aspirar no ya a vivir de su talento, sino siquiera a financiarlo a pequeña escala sin pasar apuros incluso en su economía personal
Los que defraudan son unos cabrones con pintas en el lomo que, encima de no pagar, se quejan porque los servicios públicos que se sostienen con esos ingresos, y que usan a tope porque "faltaría más", no tienen la calidad suficiente.
Nos vamos a la mierda sin remedio alguno, esa mierda intelectual y cultural en la que ya rezonga toda esta gentuza que tiene el odio por bandera.
Es año electoral, muy electoral, y eso en términos emocionales es una fatalidad enorme.
El karma es la sacarina en el café después de comer de los que están a dieta pero se han metido un lechazo entre pecho y espalda.
Han caído dos portavoces y una vicesecretaria general, esos cargos esenciales en toda estrategia de distracción para que el bueno del líder tenga el culo a salvo cuando caen chuzos de punta. La directora de comunicación también, pero como no era más que una asalariada, de ella no se habla
Gema Igual no tiene perspectiva, ni visión ni programa. Dirige Santander como si fuera un pueblo de 3.000 habitantes de los que es amiga de todos.
Irrelevancias aparte, el espionaje al presidente Sánchez y a alguno de sus ministros, por mucha normalidad que hayan querido darle al relato contándonoslo con la misma serenidad de espíritu que cuando nos desvelan las cifras del paro, es de una gravedad inusitada e incuestionable